24 de abril de 2011

España, 15 de mayo de 2011

La hora de elevar la voz ha llegado. Los ciudadanos de España quieren reivindicar, de forma pacífica, su grado de indignación por el actual estado de degradación democrática que sufre la sociedad en todas sus dimensiones.
Las últimas décadas de nuestra corta historia en democracia está plagada de vergonzosos casos de corrupción política que alcanzan su más alto exponente en los úlitmos años, agravando la sensación de malestar general de la población. A esta situación, se ha de añadir el papel que han jugado los políticos de los distintos gobiernos en la actual crisis financiera, inyectando dinero público a la banca -hecho que sólo ha beneficiado a ella misma- y recortando los derechos sociales que tanto ha costado alcanzar al pueblo.
La desconfianza generada en el sistema capitalista es de tal envergadura que se han multiplicado las iniciativas de ciudadanos anónimos en las redes sociales, sumándose a otras entidades  que proliferan en los últimos meses. Se trata de plataformas ciudadanas, exentas de carácter político en el sentido actual, es decir, no se adscriben a las siglas de ningún partido en cuestión, pero comparten un denominador común: cambiar el rumbo de sus vidas hacia la justicia y la equidad social.

El 15 de mayo de 2011 la ciudadanía de España tiene una cita en todas las ciudades, bajo el el lema DEMOCRACIA REAL YA, a las 18:00 horas. Sus repercusiones las comprobaremos en el futuro, pero no cabe la menor duda de que algo está cambiando en nuestro mundo.

8 de abril de 2011

Indignaos, revolución social en marcha

Indignaos, Stéphane Hessel (leer aquí)

No sólo suscribo cada una de las palabras de Hessel en su obra "Indignaos", sino que las considero un grito a la esperanza; grito de alguien que ha vivido el horror de lo que es capaz el ser humano y se siente en la responsabilidad de que las generaciones futuras aprendan de los errores pasados. 
Su repaso a las grandes cuestiones acaecidas en el siglo XX y principios del XXI en tan pocas páginas -¡¡sólo doce!!-, así como la profundidad y sencillez de su análisis podría explicar que sea ya considerado una llamada a la revolución social en Francia.
Sus líneas me han hecho reflexionar acerca de la necesidad de cuestionar las bases del sistema político actual, volviendo los ojos a Marx y Hegel -en cuanto a su filosofía más profunda- a los que los historiadores y políticos negaron la evidencia de sus desvelaciones y hoy se les está empezando a dar el lugar que estos pensadores merecían. 
Las ideas son corrompidas al ser puestas en práctica de una manera nefasta, pero ello no nos debe cegar ante las buenas ideas que han desarrollado grandes pensadores del pasado, presente y futuro.
El ser humano necesita de un espacio en el que crecer como individuo, al tiempo que se apoye en la comunidad a la cual pertenece. Me indigno ante lo poco inteligentes que estamos siendo en general y en particular, porque quiero un mundo más humano y tengo la esperanza de que somos capaces de construirlo.
Poseemos conocimientos, conocemos las estrategias -adecuadas e inadecuadas-, la sociedad cambiante requerirá nuevas adaptaciones, pero es la hora de los ciudadanos. Este libro invita a pensar.

Aún queda un sitio.. ¡Ya nos vemos, Boni, ;)!